Detalle del pasillo de acceso al CEIP Núñez de Arenas. Fotografía: Lorelí Padilla

Bilingües en artísticas: camino y horizonte de un cole de Vallecas

El cercanías anuncia su llegada a la estación El Pozo del Tío Raimundo, nombre significativo en la zona del Entrevías al sur de la ciudad de Madrid, en el Puente de Vallecas. Son las nueve de la mañana y niños y niñas entran al CEIP Manuel Núñez de Arenas. En la puerta del centro, un padre se despide de su hija, quien lleva en su espalda un pequeño violín. Minutos después, un padre y una madre entran al cole de la mano de su hijo; él les señala los balones de colores que cuelgan del techo y les cuenta que los han pintado en su clase. Sonríen y siguen caminando por un espacio que les resulta familiar.

El pasillo principal recibe a la comunidad educativa con plantas y con las creaciones de los niños y niñas del cole; es una entrada acogedora, colorida y llena de dinamismo. El mandala gigante de una de las cristaleras es el símbolo del Núñez, dedicado este curso al tópico elegido este año para el trabajo por proyectos: “El cuidado de la Tierra”.

El CEIP Manuel Núñez de Arenas ofrece el segundo ciclo de Infantil y Primaria, y desde 2013 apuesta por la educación artística como eje motor de su proyecto educativo. Su motivación principal es que el alumnado aprenda de manera significativa y desde una propuesta global, desarrollando sus competencias en un ambiente plenamente artístico, humanista y en comunidad. Ser “bilingües en artísticas” es su sueño, a la vez que su camino del día a día, entendiendo el bilingüismo como metáfora donde la expresión artística es como una segunda lengua para niños y niñas, una forma de comunicación, aprendizaje y desarrollo para el alumnado, y también para la comunidad educativa.

Pasillo y trabajos en los murales del cole. Fotografías: Lorelí Padilla

Para el equipo directivo la característica fundamental de su alumnado es la diversidad y la multiculturalidad. La mayoría de las familias del centro viven en el Puente de Vallecas aunque un 25% aproximadamente vienen de otros distritos; familias de comunidades minoritarias y procedentes de otros países forman parte de su comunidad educativa. 

De hecho, la diversidad de perfiles es un reflejo del entorno del centro. Para aprender más sobre el barrio de Entrevías, alumnado y docentes del CEIP realizó en 2015 una película llamada “La buena suerte”, donde se repasa el pasado, el presente y el futuro del centro y de su comunidad. Cabe señalar que el entorno del centro sobresale por la acción asociativa de ciudadanos y vecinos; el Pozo del Tío Raimundo es un buen ejemplo de ello. Sin duda, el espíritu de esperanza y compromiso por la mejora social está presente también en el Núñez.

El proyecto educativo del CEIP responde a esta realidad con metodologías activas, un enfoque multinivel y de trabajo por proyectos (para ampliar la información puede consultarse la página web del centro). Hace tiempo dejaron de utilizar los libros de texto como recurso didáctico principal para priorizar los centros de interés del alumnado (ver esta nota en El País). El trabajo por grupos cooperativos, las asambleas democráticas y la colaboración entre la comunidad educativa forman parte de la dinámica del CEIP.

Al inicio de la visita saludamos a Marta González de Eiris, directora del CEIP, quien nos señala el camino para encontrarnos con “Crecer con Arte”. Nos acompaña Cristóbal Corretje, profesor de Primaria y apoyo en los talleres de guitarra que se imparten los jueves. Este curso está en el centro como interino, a él le emociona participar en un proyecto artístico tan singular por lo que le gustaría continuar el próximo año. El mismo entusiasmo lo transmite Jesús Ruiz – o Chus – maestro de música del colegio, él imparte clases de  Lenguaje musical a todo el alumnado y también da los talleres de flauta. Es vecino de Vallecas y, al saber del proyecto educativo del Núñez, pidió su traslado al centro y transmite su satisfacción con ser parte del sueño de educar para ser bilingües en artísticas. En términos globales, este centro tiene un porcentaje de poco más del 40% de docentes en interinidad.

Nos encontramos con Isabel Bueno, anfitriona de la visita y figura clave del equipo coordinador del proyecto de artísticas “Crecer con Arte”. Nos muestra el segundo edificio del centro que alberga los espacios educativos del proyecto. Han acondicionado las aulas para las clases de violín, flauta, violoncello, guitarra, percusión, coro, teatro, danza, expresión corporal y plástica. Dos días a la semana estas aulas vibran con el aprendizaje de las artes escénicas y musicales como parte del proyecto Crecer con Arte inmerso en la Programación educativa del Núñez de Arenas y una de sus señas de identidad.

El patio del cole. Fotografía de Julio Albarrán

En el aula de Isabel nos encontramos con una parte del grupo de sexto de Primaria, la primera generación que ha llevado el proyecto de artísticas desde primer año. El alumnado nos cuenta que aprenden a tocar instrumentos o a cantar y relatan con emoción diferentes actividades en las cuales han participado, como la creación de un rap con mensajes de igualdad de género y el montaje de una obra de teatro sobre los derechos de las personas.

Isabel resalta cómo esta propuesta busca que el alumnado tenga autonomía para aprender y participar en las artes musicales y escénicas, eligiendo los instrumentos de su preferencia y siendo protagonistas del proceso creativo. El esfuerzo y la disciplina están presentes en el proceso de aprendizaje, pero su apuesta consiste en la transformación social frente a un aprendizaje meramente disciplinar de las artes.

Nuestra visita continúa con un interesante recuento del proceso del CEIP Manuel Núñez de Arenas en la búsqueda de la mejora educativa a partir de las prácticas artísticas. Isabel sintetiza la trayectoria del centro en varios esquemas claros y breves, producto de la reflexión de este centro sobre los logros, fortalezas y desafíos de su proyecto. Cuentan con una amplia documentación sobre las etapas que han atravesado, hilos con los cuales tejen evidencias sobre el cambio educativo.

En el curso 2012/2013 el CEIP se encuentra en un momento difícil y lleno de incertidumbres, que incluso vislumbra su posible cierre. El profesorado fijo apenas alcanza a cuatro docentes de los 16 que configuran el claustro, manteniéndose este número en los siguientes cursos con un equipo educativo que fluctúa año tras añoEstas maestras que se mantuvieron en el centro como importantes pilares comenzaron un periodo de búsqueda a partir de una observación clave: para su alumnado la expresión artística forma parte de su forma de relacionarse. Empezaron a formarse en nuevas pedagogías que respondiesen a los intereses detectados en el alumnado: Aprendizaje basado en proyectos, Aprendizaje Servicio, Grupos Cooperativos, Grupos Interactivos, ABN… a la vez que impartían seminarios de trabajo a los y las maestras que cada curso pasaban por el centro a realizar su interinidad. Al mismo tiempo fueron haciendo inmersiones y colaboraciones con diferentes proyectos externos, por ejemplo, con Basurama o en la convocatoria de Levadura. Especial mención realizan a la experiencia formativa “Flamenco en el aula”, un proyecto de la Fundación Antonio Gades que explora el arte Flamenco como herramienta de aprendizaje dentro del horario escolar e imbricando diferentes contenidos de asignaturas como Lengua y Literatura o Matemáticas. Isabel relata emocionada cómo observan un cambio en el alumnado al trabajar con abanicos, por ejemplo, y aprender sobre ángulos y medidas; la motivación y el aprendizaje significativo están allí presentes a partir del Flamenco. Para el equipo directivo éste fue el punto de inflexión de su cambio educativo: “se puede unir lo curricular a lo artístico”. Así, diferentes experiencias suman a la visión de las artes como eje motor del aprendizaje del CEIP Núñez de Arenas.

Teatro Foro. Curso 2019/2020. Fotografía de Julio Albarrán

El Proyecto Zoma (una iniciativa realizada desde el Aprendizaje-servicio, que consistió en la recuperación de una zona escolar semiabandonada en la que participaron más de 500 personas de diferentes colectivos), impulsó una nueva visión del Núñez. Isabel nos narra que en una jornada de puertas abiertas una familia visitante le dijo “en este colegio se ve y se huele la pobreza”, a partir de ese momento, esta frase fue un reto a superar, el Zoma se convirtió en un espacio que llenó de colores árboles, suelos y paredes, cambiando así la mirada con la que se veía al colegio desde el exterior, contagiando al entorno de la alegría musical que siempre había estado en el interior y que la gente desconocía porque nunca se habían acercado lo suficiente. 

Otro punto de inflexión fue la aceptación de su proyecto de educación artística como parte del PEC: en el curso 17/18 se le confiere al CEIP Núñez de Arenas el perfil de centro con proyecto propio de educación artística, aunque sin otorgar recursos económicos ni humanos complementarios para ello. En todo caso, adquirir el respaldo en el marco curricular les permite gestionar el tiempo escolar y su propuesta educativa para que las artes sean el eje de aprendizaje en sus proyectos.

“Empleamos el arte como herramienta de aprendizaje y de crecimiento”, como “motor de cambio educativo”, señala Isabel. El objetivo del proyecto propio es “conceder a las enseñanzas artísticas su valor pedagógico”, frente al habitual lugar secundario de las artes en el currículo, enfocándose en el desarrollo humano y en su potencia como eje motor de aprendizajes, y no hacia la productividad per se. Los buenos resultados del proyecto “empiezan a hacer un efecto llamada”, subraya Isabel, cambiando radicalmente la apreciación del barrio sobre el centro y con un impacto directo en el aumento de la matrícula.

Para el centro resulta fundamental la red de alianzas con grupos vecinales, colectivos y diferentes asociaciones, tales como la Orquesta de la Música del Reciclaje de Ecoembes (“un gran descubrimiento” como señala Isabel), Pequeñas Huellas y el Ateneo Cultural de la ciudad de Manises, dos proyectos hermanados con el Núñez. Isabel recuerda con cariño la visita de la Orquesta de Pequeñas Huellas donde estudiantes y músicos de Italia y de diversos países se encuentran con el alumnado del Núñez de Arenas y trabajan diferentes actividades artísticas y de convivencia.

En 2018 lanzan el proyecto Teoría de Conjuntos, iniciativa que conjuga las artes escénicas, la coeducación y la mediación cultural como parte del Programa Claves de la Fundación Daniel y Nina Carasso. Se recoge entonces la experiencia en el colegio que venía haciendo la Asociación Cultural Calatea en el colegio desde el teatro para la educación en valores para darle una dimensión mayor en relación con las otras artes del colegio. Durante tres años conviven en el colegio artistas que en régimen de artistas residentes o invitados puntuales que comparten con los y las peques claves en antirracismo, feminismo y anticapacitismo

Viven un periodo de transición entre el diseño inicial del proyecto de artísticas y el actual “Crecer con arte”.  Entre los cursos de 2019 y de 2020 continúan como centro piloto de la Red PLANEA, lo que les da el impulso para conformar el proyecto “Crecer con arte”. El nombre del proyecto revela su finalidad, entendiendo el arte en tres líneas principales: expresión musical, expresión escénica y aprendizaje intergeneracional a través de las actividades de “Afadrinarte”. Así, las niñas y niños del Núñez de Arenas participan un día a la semana en los talleres de artes escénicas y musicales, según la cuidadosa programación del equipo docente. El alumnado desde segundo ciclo de Primaria prueba diferentes instrumentos y cada niño o niña se compromete a tocar alguno de ellos.

A esto se suma la tercera línea de talleres de artes musicales y escénicas, llamada “Afadrinarte”. El nombre se refiere a la asociación de padres y madres (AFA) y al apadrinamiento entre participantes de distintas generaciones para aprender juntos. Entonces, dos días a la semana y en horario vespertino, el AFA y la Compañía de “Crecer con arte” ofrecen talleres de artes musicales y escénicas, donde padres, madres, personal no docente, alumnado y egresados y egresadas del centro se dan cita para aprender a tocar instrumentos y participar en el coro.

En el CEIP Núñez de Arenas tanto los talleres de “Crecer con Arte” como las actuaciones de “Afadrinarte” se relacionan con el proyecto anual de los talleres “El hijo del Capitán Trueno”, desde el que se abordan los ejes fundamentales de la Programación de Artística: género, antiracismo y anticapacitismo. El núcleo vertebrador será “La Conquista”: un concepto con múltiples significados a debatir, que enlazará con los diversos proyectos programados en los diferentes ciclos. Por bloques, todos los grupos de Infantil y Primaria desarrollarán un proyecto específico, por ejemplo, sobre el desarrollo tecnológico por etapas históricas y qué sucedería si un ladrón robara la penicilina, o sobre la conquista de derechos para las personas y las sociedades. La relación entre naciones y culturas será otro eje de trabajo a través de los temas musicales conjuntos y de la creación escénica. En el caso de los talleres de artes escénicas y musicales están preparando una obra teatral con la canción “El hijo del Capitán Trueno” que permite abordar la diversidad, cuestionar el punto de vista normativo y el derecho a ser. La letra de esta canción es el origen del tópico de este año, que emociona a docentes y a alumnado.

Para desarrollar el proyecto de artísticas, el CEIP Núñez de Arenas cuenta con el compromiso de un equipo humano y de un tejido de apoyo. El equipo directivo, los docentes de “La Compañía”, el equipo docente del CEIP, las comisiones de familias y todo el personal del centro asumen los retos de poner en marcha su proyecto. El tejido de apoyo se nutre de la participación de asociaciones e iniciativas como la Red PLANEA.  Durante la visita tuvimos oportunidad de pasar un momento por los talleres del día (jueves) y de charlar con los niños y niñas participantes. Nos encontramos un ambiente de entusiasmo al aprender a tocar sus instrumentos, alumnos y alumnas concentrados, alegres y organizados de manera individual o en grupos.

Taller de violonchelo con alumnado de Primaria. Fotografía: Lorelí Padilla

En la clase de violonchelo niñas y niños ensayan una parte de la melodía, con atención al instrumento. En Plástica trabajan la creatividad a partir de la obra de varias mujeres artistas. En el taller de coro ensayan una estrofa del “El hijo del Capitán Trueno” para la obra teatral. En expresión corporal un grupo de niñas y niños nos muestran el baile del proyecto del año pasado de manera espontánea: se nota su facilidad de coordinación para el trabajo en grupo y que esa participación fue memorable. En teatro se distribuye la labor de producción de la obra en distintos equipos o departamentos. Luego, en percusión, un grupo reducido de niños se concentra en los ritmos del cajón. Flauta y guitarra trabajan la iniciación musical, con creatividad y apertura a la música popular. En el grupo de cuerdas dos niñas con su violín preparan la contribución de este instrumento a la canción de la obra teatral.

En el grupo de cuerdas, escuchamos a dos niñas de cuarto de Primaria mostrarnos sus avances con el violín. Preguntamos por qué han elegido este instrumento y una de las alumnas nos dice que le gusta el violín porque le recuerda a la voz del tío de su mamá, quien solía cantar; más emotiva no puede ser su vinculación con el aprendizaje musical. Mientras, tanto otra alumna toca el violín con decisión, y sus profesoras nos comparten la evolución positiva que ha tenido tanto en su motivación como en la constancia para aprender a tocar el instrumento.

Después del paso por los talleres, nos reunimos con Marta González de Eiris, directora del CEIP y con Margarita Fábregas, Jefa de Estudios. También nos acompaña Isabel Bueno. Comentamos los aprendizajes del proyecto de artísticas de su alumnado, entre los que resaltamos las siguientes ideas clave:

  • El trabajo en equipo es un logro del alumnado en las actividades artísticas con proyectos comunes, integrando diferentes instrumentos y disciplinas artísticas.
  • La constancia, disciplina y el autocontrol, desarrollando la atención y la motivación, descubriendo además aspectos artísticos que les interesan. Tienen indicios de que estas experiencias repercuten en su desarrollo cognitivo y quieren profundizar al respecto.
  • Las experiencias del proyecto de enseñanzas artísticas son transformadoras. Muchos de sus niños y niñas difícilmente tendrían acceso a actividades artísticas de manera extraescolar.

Las docentes del equipo directivo están plenamente satisfechas con el proyecto propio de artísticas del centro. Asimismo, constatan el reconocimiento de las familias a que sus niños y niñas participen en las actividades musicales y escénicas; así lo comunican en las reuniones trimestrales. Margarita Fábregas destaca que el proyecto artístico da cabida a todos y todas: “una de las grandes ventajas del proyecto de artísticas [es que] todos tienen experiencias de éxito”. En cuanto al equipo de “Crecer con arte”, valoran el compromiso del equipo de docentes externos con su labor educadora y, por otro, les gustaría estar en condiciones de mejorar su situación laboral, para lo que necesitan recursos adecuados según las necesidades de su centro.

Participar como centro piloto de PLANEA ha sido un gran impulso para su proyecto educativo. PLANEA apoya la evolución y la sostenibilidad del proyecto propio de artísticas. “Es la red en la que nosotras nos sentimos identificadas”, comenta Isabel, quien valora especialmente la variedad de actuaciones y su posibilidad de adaptación o replicabilidad, pero fundamentalmente el valor de la Red es su apertura a la experimentación educativa y su apoyo sin condicionamientos para responder al contexto de cada centro.

Asimismo, para el equipo directivo, PLANEA es un antídoto a la soledad que pueden sentir centros con un perfil de innovación en arte y escuela. Es un lugar donde se sienten acompañadas, además de tomar confianza para poner en valor su experiencia. De hecho, en el Centro de Recursos de la Red PLANEA puede consultarse la guía “Aprendizajes para una enseñanza musical y escénica integrada”, que un equipo del CEIP Núñez de Arenas ha realizado como un ejercicio de recuperación de su práctica; no pretenden ofrecer recetas mágicas sino compartir algunas claves a partir de su proceso.

Seguimos con nuestra visita por el CEIP Núñez de Arenas y llega el momento de charlar con la Compañía de “Crecer con arte”. El equipo está conformado por Paula Cueto y Darío Sigco de Calatea (agente colaborador de PLANEA), Teresa Gutiérrez, Niurka López, Manuel Prieto, Antonio de Pinto y Alvany Gómez como docentes externos, y Jesús Ruiz e Isabel Bueno, docentes del CEIP. Isabel es la coordinadora de enseñanzas artísticas.

La charla fluye con naturalidad: son docentes con un fuerte compromiso con el proyecto artístico del centro, con un conocimiento detallado del contexto del CEIP, y con la aspiración de formar un espacio cultural y artístico en el Núñez para el barrio. Entre otros temas, hablamos del perfil del alumnado, de la relación de niños y niñas con las artes musicales y escénicas, de la dinámica grupal y su rol como docentes, y de los aprendizajes esperados este curso escolar con la obra “El hijo del Capitán Trueno”.

Nos comparten que el espacio vespertino de “Afadrinarte” pretende que las familias sean protagonistas y aprendices de las actividades artísticas. Esta línea de trabajo ayuda a crear lazos entre la comunidad educativa. La idea surge motivada también por ofrecer a quienes egresan del Núñez la posibilidad de continuar con el aprendizaje musical. En el Puente de Vallecas no hay escuela de Música y, para varias familias, sería imposible asumir el coste de una formación de este tipo.

Además, las niñas y los niños del Núñez tienen perfiles diversos en cuanto al aprendizaje de la expresión artística. Esto significa que en sus grupos hay multiniveles de aprendizaje y que cada niño o niña tiene oportunidades para desarrollar habilidades y romper prejuicios, por ejemplo, asociados a estereotipos de género. Por ejemplo, observan que las niñas de etnia gitana suelen enfrentarse a una falta de confianza en sí mismas.

Desde su perspectiva, resulta fundamental conocer al alumnado y generar un vínculo afectivo para favorecer el aprendizaje y la dinámica grupal, acompañándoles en el proceso de descubrirse a partir de las artes. Los docentes de “La Compañía” valoran el apoyo de los tutores y las tutoras de los grupos para dialogar sobre el proceso del alumnado. Además, la coeducación forma parte de su proyecto. Este año escolar han decidido cambiar la asignación del profesorado entre Danza y Teatro para ayudar a cuestionar, desde su rol docente como referente, que la Danza sea una expresión sólo para niñas.

En esta línea, la formación en valores, la reflexión y la apertura a diferentes expresiones forman parte intrínseca de la creación artística. “El hijo del Capitán Trueno” es una oportunidad para compartir sobre la diversidad de identidades… Y la conquista ha dado ocasión a que un grupo reflexione sobre las banderas, los himnos y las culturas (¿Para qué sirven? ¿Alguna cultura es más valiosa que otra?).

Entre los aprendizajes esperados para este curso escolar, el foco del proyecto de enseñanzas artísticas es el desarrollo socio emocional y artístico del alumnado y no el aprendizaje técnico en sí mismo. Concretamente, con el proyecto de “El hijo del Capitán Trueno” esperan que el alumnado aprenda a: 

  • Convivir con la música, con otras y otros y consigo mismos así como a escucharse y escuchar a los demás. Ponerse en la piel de otros personajes con vidas distintas e identidades.
  • Improvisar y crear. Perder el miedo a la creatividad. Despertar sensibilidades y la imaginación para enriquecer la creación artística.
  • Explorar la estructura musical de la canción e insertar aportes musicales desde diferentes niveles. Acercarse a la guitarra desde la música popular y aprender sobre el acompañamiento rítmico.
  • Trabajar en equipo y “aprender a crear en colectivo”. Ayudarse entre sí. Están utilizando el Cuaderno LOVA para organizar el trabajo de producción escénica.
  • Descubrir formas de expresión y repertorios de movimientos con mayor libertad. Explorar la estética, la forma y el espacio, integrando contenidos de Geometría.
  • Conocer cómo funciona el aparato de la voz, identificando diferentes colores que pueden crear a partir de los personajes de “la familia Trueno”.

“Crecer con arte” es un proyecto abierto a la incertidumbre creativa por definición. Como no puede ser de otra manera, trabajar por proyectos donde el alumnado sea protagonista exige un guión abierto a la emergencia, a la improvisación. El equipo cree en el proceso de creación; sí con una base de trabajo y diseño, pero sin estar prefijado el producto o los resultados.

En los próximos meses el CEIP Núñez de Arenas tiene bastante trabajo por delante. Además de la realización de los múltiples proyectos, de la obra de teatro y las diferentes actividades del cole, uno de los desafíos es avanzar en la planificación y la evaluación del tópico actual y del próximo curso escolar. Ya se encuentran avanzando en indicadores de Matemáticas que integren los aprendizajes de las enseñanzas artísticas con los objetivos de dicha asignatura.

Por otra parte, un desafío se les presenta ante la decisión de la Administración de abrir una línea de primer ciclo de Infantil en su centro, ubicando las aulas justo en el edificio de los talleres de artísticas. Si finalmente el uso de estas aulas tiene que cambiar, tendrán que habilitar otros espacios para los talleres del proyecto. No nos cabe duda de que el tesón y la colaboración que hasta el momento han llevado al CEIP a renovar su proyecto educativo serán grandes aliados para superar este y otros retos.

Actualmente, además de participar en la Red PLANEA son centro asociado del Proyecto Erasmus “Movement. Music teaching for life skills and resiliency”, de carácter internacional, una oportunidad para ampliar “Crecer con arte”. Su horizonte de largo plazo es “crear un proyecto social de enseñanzas artísticas abierto al barrio, con la música y las artes escénicas como eje vertebrador de cohesión social”. Antes de concluir nuestra visita, invitamos al lector y a la lectora a imaginar qué significa ser bilingüe en artísticas desde las experiencias del CEIP Manuel Núñez de Arenas, donde las artes son una segunda lengua para niñas y niños. 

Muy probablemente, coincida con la experiencia del CEIP: hablaríamos entonces de autoconocimiento, colaboración, expresión musical y escénica, conciencia histórica y del cuidado del entorno como aprendizajes clave, todo ello al servicio del desarrollo del alumnado, del CEIP y de la comunidad educativa. Sin duda, mucho se puede aprender de un centro como el Núñez de Arenas, que nos invita a confiar en que una educación pública de calidad, ajustada a su contexto y con un perfil propio de artísticas, es posible.

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