Riurau es el término que describe una estructura arquitectónica tradicional que protege a la uva en su proceso de transformación en uva pasa. El Colegio Rural Agrupado “Terra de Riuraus” toma su nombre de dicha herencia cultural de la actividad agrícola del entorno de Llíber y Alcalalí, en la provincia de Alicante (Comunitat Valenciana), donde tienen su sede los dos aularios del CRA. Este centro educativo de Infantil y Primaria cuida y fortalece el vínculo entre la escuela y el entorno, siendo las artes grandes aliadas para tal propósito.
El CRA Terra de Riuraus participa como centro piloto de PLANEA desde el curso 2020-2021. La Direcció General d’Innovació Educativa i Ordenació le sugiere al Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana, como nodo mediador, que invite al CRA para que participe en PLANEA. El equipo docente valora esta posibilidad y acepta su incorporación a la red, un suceso afortunado porque justo estaban diseñando su proyecto educativo, del cual destacan los siguientes ejes clave:
- El lema del CRA: “Hacer escuela haciendo pueblo”;
- Las señas de identidad: escuela inclusiva, ecoescuela, escuela feminista y plurilingüe.
- El eje vertebrador se conforma a partir del arte y la creatividad, como “herramienta protagonista para el desarrollo integral de la persona” (Plan AE del centro educativo).
Así, este centro quiere vivir las artes en el día a día de la escuela y como medio para la transformación social. El equipo directivo entiende que la escuela es un medio catalizador del entorno local, un espacio donde poner en valor la diversidad cultural y cuidar tanto los espacios naturales como del tejido social. Su Plan de Arte y Escuela (PlanAE) prevé trabajar en este sentido, además de procurar la transformación de los espacios del CRA. A todo ello se suma su participación en la Red PLANEA, y nos comparten más en la visita del equipo de evaluación al CRA realizada en el curso 2021-2022. La mirada al contexto de este centro necesita atender al paisaje y al paisanaje, como bien nos hace notar Elies Andrés, director del centro. Los aularios de Llíber y Alcalalí, a tan solo 4.5 kilómetros de distancia, están rodeados de plantíos de vid y se ubican en el Valle del Pop, con el horizonte de los montes de piedra caliza que más adelante dan paso a la costa alicantina.
En cuanto al paisanaje, llama la atención la diversidad de procedencias de las familias del CRA. Según el censo del INE de 2021, Llíber acoge 883 habitantes mientras que en Alcalalí hay 1,336 personas empadronadas. El porcentaje de población de origen extranjero en ambas localidades va del 55 al 65%, destacando la procedencia europea (con una comunidad británica mayoritaria, seguida de la población holandesa, alemana y belga). Por lo tanto, la multiculturalidad es otro rasgo de identidad del CRA. A esto se suma la variedad en el perfil del alumnado. Sus niños y niñas trabajan en grupos multigrado. Elies Andrés nos comparte que les contactan familias que buscan una respuesta educativa respetuosa y un colegio inclusivo con un compromiso con una educación de calidad para todas y todos. Como centro de tamaño pequeño tienen fortalezas para atender a su alumnado.
El buen hacer del centro ha hecho un efecto llamada en la zona, aumentando la matrícula. En Llíber se ha triplicado en el nivel de Infantil y tienen la perspectiva de seguir creciendo, sobre todo en el aulario de Alcalalí. Viven este indicador como un logro para el CRA, dado el contexto de pueblos pequeños. Elies destaca el fortalecimiento del AMPA como otro buen signo de la evolución del CRA: prácticamente todas las familias del alumnado forman parte del AMPA y se realizan diferentes actividades de formación y de celebración de festividades locales, entre otras. Nuestro recorrido por el centro deja ver el dinamismo de la vida escolar. En el aulario de Llíber, encontramos varios espacios comunes donde, sin duda, el tercer patio es el lugar estrella por dos razones: por su carácter compartido como patio del pueblo y por su mural botánico, una creación artística del alumnado de Llíber.
Aquí conocemos una de las actuaciones impulsadas desde el Consorci de Museus como nodo mediador de PLANEA del curso 2021-22: la investigación botánica que culmina en la elaboración del mural. Esta actuación forma parte del proyecto “Raíces contemporáneas”, desarrollado por Joaquín Vila y Regina Dejiménez, agentes colaboradores de la Red y artistas residentes en las proximidades del CRA. Por un lado, este proyecto se nutre de las artes plásticas de la mano de Joaquín y, por otro, del arte textil y con fibras vegetales de la mano de Regina. Conozcamos un poco más de cerca el gran mural botánico del patio de Llíber.
Los grupos de Infantil y Primaria de este aulario realizaron una investigación como parte del “Taller de etnobotánica y pintura mural” para identificar las plantas y árboles de la zona y sus usos, a partir de entrevistas con las familias y otras personas del pueblo. Cati Fernández, docente de Primaria, nos cuenta: “Cada quien trajo su planta, lo hablaron con sus padres”. La planta tenía ya un significado especial para niños y niñas, y pintarla era más que simplemente hacer un dibujo. Además, el alumnado experimentó con los colores para representar las distintas plantas, una propuesta para trabajar la creatividad. El mural fue un ejercicio de expresión libre, huyendo de formas pre establecidas para dar juego a su creatividad, incluyendo con el conocimiento significativo de la planta.
Así, en el patio que acoge el mural vemos figuras coloridas y pequeñas notas informativas sobre los usos y las propiedades de las plantas. El tomillo puede ser aprovechado como: “comida, sopa medicinal, infusiones, pescado” y “manjar”. El Llentiscle (lentisco): “potabiliza el agua, decora las calles junto al mirto”. Varios niños y niñas recuerdan con emoción haber pintado sus vegetales y nos hablan del “muro que hemos pintado” con “las plantas nuestras”, teniendo presente para qué aprovecharlas. Romero, cebollas, camomila, ortigas y otras plantas más acompañan al curioso paseante del patio, un lugar que brilla con este guiño del cole a su entorno.
“Cada quien ha dibujado lo que ha querido”, apunta con alegría Elies Andrés, lo que se aprecia en las siluetas, las distintas figuras de plantas y el juego colorido del mural. Asimismo, el aprendizaje de la Escuela del Garabato, otra iniciativa de la Red, aportó a la experiencia artística del mural puesto que asumen que “un dibujo nunca puede estar mal hecho”.
Otro proyecto realizado fue la mejroa de la entrada del aulario de Llíber, en una creación conjunta del alumnado del CRA y de Regina Dejiménez, aprovechando materiales naturales de la zona. Todo ello forma parte del diálogo entre agentes colaboradores y docentes para desarrollar en conjunto las actuaciones artísticas, siendo esto una de las fortalezas de PLANEA: “Una de las cualidades que tiene PLANEA es que es un proyecto o material abierto, lo puedes contextualizar en el sitio”, resalta Elies. Para la comunidad docente del CRA esto es fundamental porque los proyectos son fruto de un proceso dialógico y creativo para responder a las necesidades de cada centro educativo.
De hecho, Rosa Mestre, docente de Infantil en Llíber subraya que la repercusión que encuentra más significativa de PLANEA es: “la mirada de los artistas, cómo conseguimos trabajar en equipo; nosotros desde la visión pedagógica, de organización del grupo y concreción de las actividades, y ellas desde una mirada más amplia que la nuestra…, más libre”, y expresa su satisfacción con el trabajo con Regina y Joaquín. Desde su experiencia, el encuentro entre un artista y un maestro o maestra es “ideal” porque su alumnado está contento y motivado por participar en las diferentes actuaciones de arte y escuela.
En su aula podemos ver a niños y niñas utilizando los materiales de Calaix. Rosa Mestre les ha planteado un reto: en equipo construir una estructura. Esta colaboración es “difícil” dada la edad del alumnado, nos cuenta Rosa, mientras observa y anima a los grupos de niños y niñas a colaborar entre sí. Al equipo docente le ha gustado mucho el material de Calaix y la formación en línea con Arquilecturas, agente colaborador de PLANEA. Para las docentes, estas experiencias artísticas permiten al alumnado desarrollar un pensamiento creativo, divergente y crítico, que trasladarán a sus experiencias de vida a partir de las competencias desarrolladas, de la curiosidad y de la capacidad de cuestionarse.
Seguimos el recorrido por las aulas del CRA en Llíber, comunicadas por puertas y no por pasillos. Las aulas albergan diferentes rincones y materiales de trabajo: juegos de mesa, maquetas de los proyectos que han realizado, el calendario del CRA con los cumpleaños de su alumnado y docentes, la lista de temas a trabajar en el día, un sitio confortable con un sofá, mesas y guías de aprendizaje. El ambiente es familiar y distendido, y niños y niñas trabajan con la guía de sus docentes. En una de las aulas encontramos el kit de Animaleta, iniciativa de PLANEA, frente a un ventanal para disfrutar del entorno de Llíber: un juego metafórico de ventanas al exterior y al interior del ámbito digital para fomentar la creación de mundos posibles.
Se percibe un ambiente de comunidad en las dos escuelas rurales, fruto de diferentes actividades en colaboración con el entorno y de diferentes experiencias que fortalecen una identidad renovada, abierta y compartida entre el centro y la localidad. De hecho, en el curso 2021-22 el alumnado de Alcalalí crea un himno dedicado a su pueblo: Alcalalí, “Som d’Alcalalí”, con la participación de varios artistas, docentes, alumnado y comunidad del entorno. Compartieron este vídeo en las fiestas del pueblo y ha tenido una acogida sorprendente. Para ellas y ellos esta es una forma de seguir haciendo pueblo, de revitalizar la identidad compartida y celebrar un presente y un futuro en común, también a través de la creación artística.
El equipo docente tiene varias ideas para mejorar los espacios del aula de Llíber. Además, ambos aularios experimentan un crecimiento importante dado que en el curso escolar 2022-2023 ampliarán la cobertura de Infantil y hay un aumento general de la matrícula. La línea de transformación de espacios cobra importancia y, para ellos, tiene una relación directa con las artes para la creación de espacios educativos y sociales significativos para su comunidad. Concluye nuestra visita por el aulario de Llíber y nos trasladamos a las instalaciones en Alcalalí. La sede que visitamos del colegio de Alcalalí se ubica en un edificio del Ayuntamiento, temporalmente cedido a la escuela rural en lo que se abren las nuevas instalaciones del CRA, justo en septiembre de 2022. Iniciamos nuestra visita en esta sede y, a la entrada, encontramos algunas huellas del paso de PLANEA por los espacios, como una decoración con fibra textil.
Sìlvia Andrés, docente de quinto y sexto de Primaria y miembro del equipo directivo, lidera el proyecto de creación audiovisual con Animaleta. A partir de distintas fases organizan el proyecto, de manera que el alumnado experimente progresivamente con las posibilidades de esta técnica. Primero, el alumnado crea animaciones a partir de una mínima explicación. Luego, elaboran vídeos breves con el tema del cuidado del agua y con la consigna de comunicar un mensaje concreto, a elegir por cada equipo. El alumnado agrega efectos y música, siguiendo la técnica de stop motion. Como parte del cierre del proyecto se organizó una formación en cascada donde el alumnado de sexto mostró a sus compañeras y compañeras tanto los vídeos como el proceso creativo. Sìlvia nos comparte que en el próximo curso escolar (22-23) seguirán trabajando Animaleta y stop motion como herramienta de aprendizaje y creación.
Para Silvia, conocedora ya de la técnica stop motion, resultó de interés compartir esta experiencia con otros centros colaboradores de la Red. Ella apuesta por este tipo de actividades porque el alumnado desarrolla su capacidad de expresión a partir de prácticas artísticas. Concretamente, con Animaleta su alumnado desarrolla una comunicación creativa a partir de habilidades que pueden transferir a otros ámbitos y ser de apoyo para aprender a aprender. Incluso, algunos de sus niños y niñas ya han mostrado dicha técnica en casa y la han aprovechado para crear, por ejemplo, una felicitación de cumpleaños. En el aula de Sìlvia pudimos ver algunos de los vídeos que el grupo de sexto de Primaria ha preparado. Un corto nos presenta a unos peces que sufren por la contaminación de desechos plásticos, una historia que transcurre con una chispa de humor. Luego, el alumnado nos muestra sus storyboards y nos explican cómo graban sus vídeos con el kit de Animaleta. La profesora ha aprovechado ordenadores y otros materiales que tenían en el aula para acondicionar estaciones de trabajo donde cada equipo crea un escenario o maqueta en miniatura y combina las piezas del kit y otras añadidas para crear los personajes de su historia.
Un equipo de alumnas nos cuentan sobre algunas escenas han quedado pendientes por grabar porque no hay más tiempo, y que añadirán música y diferentes efectos a sus vídeos. Niños y niñas califican de divertido el proceso, valoran positivamente el trabajo en parejas para imaginar y crear, y les gusta crear formas distintas con plastilina. Además, está en juego la competencia digital. Con mucha emoción nos comparten sus avances. Como parte del proyecto Silvia imagina una Master Class con algún artista o creadora profesional de la animación y, de preferencia, con un perfil que provenga de un entorno distinto al del CRA. La clase sería un espacio de aprendizaje e intercambio dirigido al alumnado para profundizar en la creación audiovisual, a la vez que sería una buena oportunidad para abrir horizontes sobre la formación y el desarrollo profesional en este campo. A lo largo de nuestra visita el alumnado transmite que las actividades de arte y escuela les gustan porque “Se pueden hacer cosas muy chulas”, porque aprenden a coser y a pintar, por ejemplo. Y para el profesorado es valioso que se puedan hacer muchas cosas con materiales como plastilina, gomas y lápices… “Nos complementa mucho lo que hacemos a diario, estos proyectos son muy motivadores”. “Y no todo pasa en la ciudad”, afirman.
El lema del cole se vive también a partir del arte como recurso transformador. Una muestra de ello fue la “Jornada de convivencia” que organizaron con la guía de Regina Dejiménez, donde el alumnado, padres y madres de la comunidad se reunieron a compartir un tiempo libre de tejido y de creación de un gran bastidor. El eje artístico es transversal y permite fortalecer los vínculos con la comunidad educativa más allá del aula, pero también a partir de los espacios del nuevo aulario. Elies nos muestra con emoción las instalaciones que inaugurarán en el curso 2022-2023: un edificio de 1928 que ha sido acondicionado especialmente para el CRA. El nuevo aulario tendrá un sitio dedicado a las artes, una zona común de paso y abierta donde siempre habrá materiales y zonas de aprendizaje permanente, además de compartir las creaciones del alumnado.Asimismo, la fachada del edificio acoge una de las creaciones artísticas del alumnado, realizada en colaboración con Regina y Joaquín: pinturas hechas sobre tablones de madera fruto de la libre expresión y la creatividad de niñas y niños, con la temática de la riqueza de plantas del entorno natural y sus usos en la localidad.
El equipo docente se emociona especialmente con las posibilidades que tendrán gracias a las nuevas instalaciones del aulario de Alcalalí. Justo detrás del edificio nuevo proyectan la habilitación de un patio y una zona verde para el centro. Además, en colaboración con el Ayuntamiento, una de las parcelas que tiene un Riurau será recuperada como lugar público de reunión, un punto de encuentro para eventos culturales en el pueblo. Todo encaja conforme a su Plan de arte y escuela; uno de sus sueños consiste en organizar eventos culturales para su entorno.
Las actividades de PLANEA generan satisfacción en la comunidad educativa por la expresión artística, libre y en comunidad, además de la reflexión que suscita sobre la riqueza y diversidad cultural. Todo ello se suma a las actividades artísticas que realiza el CRA. “La semilla y la experiencia se quedan”, comenta Elies Andrés ante la pregunta por la sostenibilidad de apuestas educativas como PLANEA. Al hilo, comparte la siguiente reflexión: el asesoramiento de un agente externo que impulsa las prácticas artísticas en la escuela favorece que las comunidades docentes y educativas exploren “sitios” y recursos a los que, quizás, no llegaría un centro por sí mismo. Resulta de vital importancia que las actuaciones de arte y escuela se adapten al contexto, más aún en un ámbito rural como el del CRA.
PLANEA en este centro es un impulso para el cambio educativo en dos direcciones: al interior del centro y en relación con su entorno. Además, su participación en la Red complementa su trayectoria con las artes para la educación y la relación de colaboración con las familias, con los habitantes de los pueblos, con el Ayuntamiento y otros agentes. Asimismo, el equipo directivo valora positivamente la Red como punto de encuentro con experiencias de arte y escuela en distintos territorios. Desde la perspectiva del equipo directivo el proyecto educativo del CRA avanza con pasos firmes. Quieren continuar con el trabajo pedagógico y organizativo en los aularios, visibilizar el CRA en su entorno y fortalecer el vínculo con los pueblos. Estamos deseosos de conocer los proyectos en marcha en el curso 2022-2023. Ahora con su nuevo aulario de la sede de Alcalalí imaginan un espacio común en el gran patio, con los riurau como testigos del pasado y de un futuro compartido.Así, el CRA quiere seguir revitalizando la cultura de su entorno pues recordemos que: “Nadie educa a nadie —nadie se educa a sí mismo—, las personas se educan entre sí con la mediación del mundo.” (Paulo Freire, Pedagogía del oprimido, 1970)